[:es]El rostro es el espejo del alma. Y nunca mejor dicho porque ya se pueden detectar enfermedades gracias al reconocimiento facial. Hasta ahora, gracias a la tecnología móvil, nuestra cara revelaba casos asociados a problemas dermatológicos pero parece que este método podría detectar otras posibles dolencias. Una noticia publicada en Consalud.es destaca que los científicos han diseñado un modelo de ordenador que predice con precisión la salud en función de la forma del rostro.
Esto es posible debido a que la fisonomía cambia de acuerdo a las alteraciones psíquicas y físicas que se produzcan en el cuerpo. En el rostro de una persona se puede leer el cansancio, la fatiga, el dolor, etc. Por ejemplo, tal y como señala la publicación, la cara de una persona con depresión es triste, opaco, cerrado, inmutable y de mirada apagada; la de una persona ansiosa tiene un temblor en los labios y un mirar inquieto; mientras que la de un esquizofrénico se caracteriza por una mirada ida.
En este sentido, los ojos son uno de los órganos faciales de los que mayor información se puede extraer. Los nervios de la pupila, el tejido de la retina o el nervio óptico pueden dar pistas de la existencia de enfermedades no oftalmológicas como patologías del sistema nervioso central, enfermedades neurodegenerativas, accidentes vasculares, traumatismos o incluso de forma más inusual puede ayudar a mostrar huellas de determinados tipos de cánceres, esclerosis múltiple, diabetes o tiroides.
Lo mismo ocurre con la piel, que se postula como uno de los principales síntomas de alerta ante la alteración de nuestro organismo. La aparición de manchas, rojeces o incluso la común sequedad pueden ser una alerta de que algo está pasando. Por ello, ante determinados cambios en nuestro rostro, los especialistas recomiendan acudir a la consulta del doctor.[:]